Petrushka, uno de los ballets rusos de Stravinsky fue compuesto en 1910 y estrenado en 1911. Marcadamente antirromántica en muchos aspectos, contiene muchos de los elementos que no abandonarán su música Su forma de exponer las melodías es diferente al tratamiento tradicional, en lugar de un desarrollo temático melódico- armónico, el compositor prefiere unir un número determinado de módulos melódico-rítmicos, el resultado del texto musical se produce en base a las diferentes combinaciones entre esos módulos. Este proceso constituye en sí uno de sus característicos sellos formales.
La película es una producción de 1997 del Ballet Bolshoi que reconstruye la versión del estreno y nos muestra un enorme y atractivo colorido ambiente ruso con la coreografía original de Forkine y la escenografía y trajes también originales de Alexander Benois. Espectacular.